El 6 de noviembre 2016 tuvo lugar en Roma el Jubileo de los presos. Y tuvimos la alegría de recibir y acoger en casa a algunos de los participantes. Fue también para nosotras una manera de celebrar el Año de la Misericordia. Agradecemos a Mariano sj el haber elegido vivir en nuestra Comunidad y compartimos sus palabras…

Querida Carmen y Comunidad: Jesús se encuentra sorpresivamente con una samaritana y le ofrece agua de vida eterna. Os encontrasteis sorpresivamente con tres samaritanas y un samaritano y con vuestra acogida y cariño les disteis agua viva para siempre ( los acompañantes somos secundarios).

En vuestra capilla hicimos un acto penitencial con la parábola del Padre misericordioso para que se sintiesen que Dios Padre corría a su encuentro y las llenaba de abrazos y besos, eso fue la absolución , les di dos besos y un gran abrazo, significando la imagen del Reinado de Dios.

Al abrir la puerta santa les dije que era santa porque el terreno que pisaban era sagrado, no por la puerta, sino por sus vidas y que era un gozo poder pisar el mismo terreno y pasar por la misma puerta que ellas.Las entrevistaron camino de la puerta santa y tanto expresaron como se sentían queridos/as que hicieron llorar a las entrevistadoras.

La misa con el Papa la vivieron con profundidad y al vernos vestidos de casulla, cuando volvíamos a la sacristía, se nos tiraron a abrazarnos, ahí nos volvieron a hacer consagrados, sagrados con ellas y él.

Después de mojarnos a tope, conseguimos entrar en el Gesú, yo me emocioné en la tumba de Arrupe y una gitana sen encontró con Dios ( así nos lo expresó).

Gracias por darnos esos días el agua viva

Mariano Moragues